Frío arrasador, que se desliza por mi espalda, al verte aparecer por la morada de la puerta. Fuego en tus pupilas que delatan tu deseo, llanto sordo que desprende un escalofrío que se apodera de mi cuerpo.
¿sabes que te he buscado todo la vida?, que me muero por verte, por olerte, por sentir el aroma de tu pelo sobre mis labios, que no puedo desprenderte de mis pensamientos, que en la noche fría busco el calor en mi pensar; el que siento al acordarme de ti.
Avivas las ganas que tengo de vivir, de luchar cada momento por sobrevivir a tanta agonía. ¿sabes que daría mi vida por que fueras parte de mi alma?. Pero, entiendo que cuando lo mas deseado no puede ser mas que un infinito sueño, no se puede luchar contra lo imposible.
Cuando buscas en el corazón de las estrellas, sabes que puedes encontrarte con que esa estrella, brilla para otro.
Me siento a descanso de la noche y le hablo a la luna llena, Madre de la noche, serena y viva, la misma que me cuenta que el destino de mi alma lo encontraré mas tarde o mas temprano, que te libere de mis pensamientos, que te siga queriendo en la distancia del deseo, pero que busque otra estrella con la que compartir mi pequeño reino.
Que la tarde del verano es mucho mas larga, que la fría noche del invierno, y que la felicidad y el derecho a querer a alguien, es derecho y decisión de cada uno. Tu podrías ser querido con locura y querer hasta que te faltara el aliento, pero si no quieres querer ni quieres que te quieran, no es culpa ni de el sol, ni de las estrellas, ni de la luna
Siempre estaré ahí para lo que necesites, siempre te estaré guardando, siempre te querré.
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